SÍ AL GRADO
SÍ A LA UNIVERSIDAD
SÍ A LA NORMALIZACIÓN DE LAS ENSEÑANZAS ARTÍSTICAS
La larga mano de ACESEA, como lado oscuro de la fuerza, se deja sentir en algunas iniciativas recientes que, por su marrullería y sus malas artes, debieran ser incluídas en aquella obra magnífica que Jorge Luis Borges tituló Historia universal de la infamia.
Se lanza ahora una campaña que reclama el "grado" para las enseñenzas artísticas cuando los representantes de ACESEA, que copan el Consejo Superior de Enseñanzas Artísticas, saben que el "grado" es una denominación que jamás será posible, pues grados sólo los hay en la universidad.Y me remito al borrador del acta de la última reunión de la Permanente del Consejo, donde se oyeron estas palabras:
La Presidenta expone la respuesta de los rectores universitarios a este planteamiento: entienden que el grado es propio de los estudios universitarios, porque tanto el proceso de acceso del profesorado, como el de verificación que se realiza de los títulos, tienen exigencias mayores en la universidad, cosa que en cambio no sucede con el máster, no exclusivo del ámbito universitario.
Y, en efecto, en la actualidad crecen como setas los títulos de grado en enseñanzas artísticas en las universidades españolas, en tanto ACESEA sigue impertérrita defendiendo posiciones que en ningún caso fueron avaladas y consensuadas con los centros que dicen representar. Y lo hacen sin reparar en los graves prejuicios que se le podrían causar al alumnado toda vez que diferentes instancias ya no reconocen la equivalencia de titulaciones:
Així mateix, us fem saber que d'acord amb l'apartat 2.1. de l'annex 3 de la Resolució EDU/2053/2010, de 14 de juny, esmentada anteriorment, l'expedient acadèmic del Títol Superior d'Art Dramàtic i del Titol Superior de Dansa es valora com a mèrit a l'apartat d'autobarem en el procés d'inscripció a la borsa de treball de personal docent. No obstant, pel que fa a la valoració dels mèrits en l'apartat 2.3 d'aquest mateix annex, s'estableix que es tindran en compte, estrictament, les titulacions universitàries. En cap moment fa referéncia a què es tinguin en compte titulacions declarades equivalents.
Així mateix, us fem saber que d'acord amb l'apartat 2.1. de l'annex 3 de la Resolució EDU/2053/2010, de 14 de juny, esmentada anteriorment, l'expedient acadèmic del Títol Superior d'Art Dramàtic i del Titol Superior de Dansa es valora com a mèrit a l'apartat d'autobarem en el procés d'inscripció a la borsa de treball de personal docent. No obstant, pel que fa a la valoració dels mèrits en l'apartat 2.3 d'aquest mateix annex, s'estableix que es tindran en compte, estrictament, les titulacions universitàries. En cap moment fa referéncia a què es tinguin en compte titulacions declarades equivalents.
He ahí la respuesta de la Dirección General de profesorado de la Generalitat de Cataluña. Más claro agua. Y pronto habrá graduados universitarios en todas las enseñanzas artísticas. ¿Qué sucederá entonces? ¿Qué es lo que ya sucede en Conservación y Restauración?
La "trampa" podría consistir en lograr una titulación de "grado artístico" que sería equivalente a todos los efectos al grado universitario, pero no sería nunca un grado universitario. Y seguirían los tiempos del "a todos los efectos", solo que sabemos que hay muchas cosas en las que no somos equivalentes a ningún efecto. Somos centros de secundaria que imparten títulos superiores, y en el fondo, por mucho que digan los responsables de ACESEA, eso es lo que ellos desean que sigan siendo.
En algunos casos se hacen afirmaciones que en nada se ajustan a la realidad de los hechos, como la siguiente:
D. Francisco Luís Lemes Castellano propone que se manifieste claramente que la voluntad política es la de optar por la equivalencia de títulos, cuando lo que propone el sector es la denominación de grado. Por otro lado, entiende que la mayoría de centros pretende encontrar una mayor autonomía para la consecución de la excelencia, pero no necesariamente la integración en la universidad dado que los requerimientos de las distintas enseñanzas son diferentes y en ocasiones las escuelas preferirán un reputado profesor a un doctor; la posibilidad de adscripción tampoco parece la más adecuada en esta línea.
No olvidemos que el señor Lemes Castellano fue el autor de la ponencia que ha conducido a la actual situación, al utilizar con una cierta alegría la denominación de "grado", lo que provocó el recurso de los rectores y decanos. La invocación a la "mayoría de los centros" es una falacia porque ACESEA va perdiendo centros día a día, y porque el ser un reputado profesor no es incompatible con ser doctor, como ocurre en tantos países del universo mundo. Las palabras del señor Lemes suenan a siglo XIX.
La campaña que pone en marcha ACESEA por agente interpuesto es una marrullería por cuanto junta varias cosas, es decir, trata de engañar al lector/a por cuanto somos muchas las personas que queremos el grado, pero en la universidad, somos muchas las personas que queremos que las enseñanzas artísticas sigan un proceso de normalización en infantil, primaria, secundaria y bachillerato, pero QUIEN FIRME ESTO ÚLTIMO TAMBIÉN FIRMA EL NO A LA UNIVERSIDAD. Por eso nos parece una campaña torticera.
ACESEA y sus agentes no pueden lanzar una campaña en favor del grado y en contra de la universidad, sin más, y por eso piden otras cosas que tengan gancho, y mezclan churras con merinas, en un ejercició de confusión que busca pescar en río revuelto.
Por eso es importante hacer valer el peso de nuestras razones, y por eso es importante que en todos los centros educativos de toda España se creen comités de apoyo a la Plataforma, para organizar una acción coordinada que permita mostrar y demostrar a las administraciones educativas que somos más, muchos más, los que queremos grado, universidad y Espacio Europeo de Educación Superior.
Crea en tu centro un cómité y establece contacto con la Plataforma. Y sigue activando la recogida de firmas en change.org No permitas que la situación actual de las enseñanzas artísticas superiores se mantenga durante otros veinte años.
Estamos a un paso de la victoria.
Juntos, podemos.
Juntos, podemos.